12 de diciembre de 2011

Cosa de dos.

Hay una cosa que aprendí de todo lo que pasó, en nuestra relación. Por mucho que se piense, se diga o se muestre en cualquier lado, una pareja o relación es cosa de dos. Y eso no hay que olvidarlo nunca. No se trata de ir siempre juntos. Ni de vivir cada uno su vida. Una relación de pareja es vivir dos personas una vida en conjunto. Si él o ella no puede es por algun motivo, mejor hablarlo y aclararlo lo antes posible. A mi siempre intentaron mostrarme lo divertido que puede ser un viaje en equipo. No solo hacerlo, sino programarlo, buscar lugares, mirar fechas… Lo mismo es cuando se cocina. Se va a buscar una pelicula al videoclub. O cuando estan solos.
Muchas personas, y entre ellas me cuento yo, vivimos la relación desde bases equivocadas, la desconfianza, la individualidad, el orgullo, los celos, inseguridades y más. Esas son enfermedades que dañan todo lo que toca. Y estoy totalmente de acuerdo, que la desconfianza nace del miedo. Ese miedo, esa desconfianza, desaparecerá. Sino es así volvé a buscar más adentro, busca cuales son tus miedos y empezá a preguntarte si son reales. Nuestra mente nos juega malas pasadas muchas veces. Y lo que tanto tememos, de lo que tanto desconfiamos no deja de ser producto de nuestra imaginación. Un miedo no real. 
Muchas personas seguro que tienen miedo a que la relación fracase, piensan en el futuro. Pero no vemos lo absurdo que es? La relación es el AHORA. El presente puro. Si empezamos a preocuparnos por lo que nos ocurrirá, damos pie a que ocurra. Las personas tuvimos mucho tiempo olvidado, algo con lo que nacimos. La confianza. Aunque nosotros dejamos que nuestro entorno, los golpes que nos dan, vaya minando esa confianza. Esa confianza, como todo en la relación: ES COSA DE DOS. No podes estar bien o sentirte bien sino confias en la persona con la que te relacionas. Mira dentro tuyo, y preguntate en que porcentaje confias en tu relación. Al iniciar una relación, uno no se plantea si confía o no en la otra persona, simplemente lo hace. Hasta que aparece la mente, las dudas, el entorno. No dejemos que eso ocurra. Tenemos que librarnos de vivir infelices de la mejor manera, confiando uno en el otro. A veces creemos que lo que nos hace desconfiar es una tontería pero si no la limpias lo antes posible, tarde o temprano nos hace daño. Cualquier cosa, la minucia que sea, la llave es hablar, hablar y hablar. 
Otra cosa que se olvida y que creo es realmente importante, es la confianza de los dos como pareja. Si los dos tienen una buena base: amistad, amor, cariño; pase lo que pase, esa relación no tiene por que romperse. Toda relación tiene momentos difíciles, críticos y duros igual que buenos, maravillosos y sorprendentes. Así es la vida. Pero si creemos en nosotros mismos, si creemos en nuestra pareja, y si creemos en nuestro amor pase lo que pase se podrá superar. Yo confío en ello.

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