31 de mayo de 2013

Hace tiempo que vengo sintiendo esta despedida, un manto negro cubre todas las heridas, y hasta cuando recuerdo aquella tarde que te ví, en la que dijiste amarme, y pediste una nueva oportunidad… Y me negué, o intenté negarme, con mi orgullo siempre vacilante, sin embargo mi amor fue más fuerte y te dí una oportunidad más. Quién pensaría que esta herida se volvería a repetir otra vez... Quién pensaría que esta herida dolería un poco más. Hubo momentos felices, pero el tiempo cambió tu manera de amar, las cosas no fueron como pensamos, ya no hay a quién culpar. Estabas lejos, la mirada ausente, y yo queriendo luchar.. ¿Para qué? No se puede pelear contra la nada, se necesitan dos para triunfar. Por eso me voy, como lo prometí, como me lo prometí a mí misma, con un poco de tristeza a cuestas, y la sensación de nunca más volverte a ver. Con el corazón, un poco roto, y otro poco vacío, ya no hay mitad. Confieso que sí, que yo te amé, de un modo casi sobrenatural. Sin embargo, nada fue suficiente, seguías lejos, sin poderte alcanzar.. Quién pensaría, que esta herida se volvería a repetir otra vez.. Quién pensaría, que esta herida dolería un poco más.

No hay comentarios:

Publicar un comentario